martes, 20 de noviembre de 2012

al motor de mi alegría fuerza



te hago caso y escribo mi dicha
de verte respirarte festejarte dicha
de soñarte dicha de pensarte y
saberte conmigo
respiro soles
presiento un aroma dulce en el agua
de la rutina que ahora es camino de
alegría
no estás aquí sentado pero tampoco
es necesario porque te quiero corriendo
detrás de sueños que tu pecho guarda
entredormidos
no escucho ahora tu vos/z aunque me gustaría
aunque el relato de tus ojos ya ha dicho

y ya no hay tiempo de nada ni de pensar ni
de preveer ni de considerar solo existe la
posibilidad de gozar de la dicha mía que
es tuya porque sos el motor de la alegría de
la fuerza de mis últimos dieciocho días