yo no sabía del aire de esas risas.
ni del olor de estos descubrimientos.
no imaginaba porque daba pasos dormida
y ellos también andaban por esta vía
respirando sufriendo pariendo viviendo
danzando vida mamarracho.
me enamoraron con sus cálidas manos francas.
me transportaron a casa con sus palabras. cuando
me miraron fue desde dentro. sí que lo vi.
y si hoy esta casa se derrumba en pedazos, me llevaré
la dicha de haber sido querida por ellos. y si hoy este
techo se me viene encima, me quedarán sus ojos
sin máscaras que hicieron de mis últimos días un
mundo de imágenes de colores. me quedará este amor.
cuando en la oscuridad estoy, sé que algo brilló.
y cuando no haya luz, pensaré en ellos; que están
en mí, ayudando a bombear este diario soñar.
miércoles, 5 de enero de 2011
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